
Luego se llevaron a los judíos,y no dije nada porque yo no era judío.Luego vinieron por los obreros,y no dije nada porque no era ni obrero ni sindicalista.
Luego se metieron con los católicos,y no dije nada porque yo era protestante.
Y cuando finalmente vinieron por mí,no quedaba nadie para protestar .
Estas frases son de Bertolt Brecht.
(recibimos, de Jesús Rodríguez, y publicamos)